#ARDEVALENCIA: ¿Un cisne negro?
¿Qué es un
cisne negro? ¿Nos expone la crisis a un aumento de los mismos? ¿Estamos en
manos de ineptos que viven completamente al margen de estas cuestiones? Todo
esto y mucho más en el post más pegado a la actualidad de elektropoplítiko.
LA
TEORÍA DEL CISNE NEGRO
"Es una metáfora que encierra el concepto de que un
evento es una sorpresa (para el observador) y tiene un gran impacto. Después
del hecho, el evento es racionalizado por retrospección." (WIKIPEDIA)
Como
leemos, se trata de un evento inesperado pero que a posteriori tiene una
explicación lógica. En esta categoría de eventos podemos meter los atentados
del 11-S, los aplastamientos de personas en el Love parade, la primera
Guerra Mundial... en definitiva, eventos de gran magnitud que no
fueron predichos. Pero ¿Qué relación tienen los
cisnes negros y el actual contexto de crisis? Pues, por desgracia, mucha.
En primer lugar, pensaremos en un cisne negro como un evento
evitable. Existen cisnes negros inevitables, como la caída del asteroide sobre
la tierra que puso fin a la era de los dinosaurios, pero esos no nos interesan.
¿Y cómo evitar un cisne negro? No hay otra que invertir en seguridad,
educación, infraestructuras, energías limpias... cosas que en España, con
unos políticos como los que tenemos, parece misión imposible. Actualmente lo
único que importa es ahorrar y reducir déficit. No hay lugar para el gasto en
protección de montes, la sanidad universal o para que las grandes empresas
cumplan las leyes escrupulosamente. Hace falta pasta, y hace falta ya.
Pero ¿Es bueno para la economía ahorrar en cosas como la
protección del medio ambiente o el mantenimiento de infraestructuras? En mi
opinión, no. Un evento inesperado de gran magnitud también supone un gasto de
gran magnitud para el país, eso por centrarnos exclusivamente en la parte
económica del asunto y no pensar en el drama que se oculta tras estos eventos. Por
pegar este post a la realidad, pensemos en primer lugar en el dinero que habría
costado a la comunidad Valenciana hacer unos cortafuegos decentes en sus
montes. Ahora pensemos en lo que va a costar repoblar esos montes e indemnizar
a los damnificados: seguro que esta segunda cifra es más de lo que se ha
recortado para la prevención de incendios.
El
lector puede pensar que decir que los incendios que están sucediendo estos días
en la comunidad Valenciana son un cisne negro es una exageración, ya que, por
desgracia, un incendio en España es algo mucho más habitual de lo que a todos
nos gustaría que fuera, pero a lo que intento llegar con este post no es a este
incendio, al cual, por desgracia, ya se llega tarde, sino a los futuros cisnes
negros que puedan aparecer en nuestro país a causa de la mala gestión de
nuestros políticos. A continuación nombro unos cuantos que se me ocurren, pero
si pensamos en las medidas que va tomando el gobierno la lista puede ser
interminable:
1:
Ya se habló en su día, con la retirada de la sanidad a inmigrantes del problema
que eso puede suponer en un futuro no solo para los afectados por la medida,
sino para toda la población. Enfermedades como la tuberculosis ya prácticamente
extinguidas podrían volver a formar parte de nuestro día a día, o incluso haber
una pandemia de cualquier otra enfermedad que generara unos costes económicos
incalculables (dejando de nuevo de lado los costes humanos, mucho más
importantes a mi parecer).
2: El cobro por la seguridad de grandes eventos
deportivos o musicales. Es discutible si el estado debe pagar o no la
seguridad en un concierto de Justin Bieber, pero no me quiero imaginar las
estimaciones de seguridad que harán las propias empresas si ellas mismas tienen
que pagarla. Fácil que nos encontremos con otro caso como las muertes durante
el Love Parade en España o cualquier caso similar.
3:
Esperanza Aguirre ya habla de cambio de la ley antitabaco en caso de que le
estorbe para construir Eurovegas. ¿Qué pasará el día que el Sheldon Anderson de
turno pida que se cambien por ejemplo las medidas de seguridad de un recinto o
un festival?
4:
Fin de las becas, aumento de los precios de autopistas y transporte público o
reducción de profesores son solo algunos ejemplos más de las medidas
irresponsables del gobierno que acercan a la población al límite de su aguante
y que puede hacer que antes o después vivamos revueltas parecidas a las que se
vivieron en Londres el año pasado. Dificultar a un sector de la población como
los jóvenes cualquier tipo de movilidad social puede hacer que este gobierno se
arrepienta de apretar las tuercas a los de siempre.
5:
Fuera de España ya vemos florecer de nuevo el pensamiento nazi más radical sin
que la unión europea parezca interesada en frenarlo, a pesar de que se lancen
veladas amenazas de muerte a ciertos sectores de la población. No
olvidemos que el nazismo nace por la desesperación de los alemanes tras la
crisis de 1929. En el tiempo que nos queda de crisis ¿Hasta donde llegarán
estos fanáticos?
6:
¿Quién sabe lo que está por venir? Puede que abandono de infraestructuras,
puede que aumentos de los precios de los carburantes y la electricidad, puede
que mayor laxitud en las leyes para que las constructoras puedan abrirse paso
sobre terreno quemado o protegido... Hace 4 años nadie podría imaginar según
qué tipo de cosas, pero hoy día, con la desesperación que tiene un amplio
sector de la población, todo empieza a verse posible.
Como
conclusión, repetiré que mucho más importante que lo que suponen los millones
de euros de estas desgracias son las vidas humanas o la flora o fauna que se
destruya por el camino, pero lo que pretendo decir es que las medidas
económicas del gobierno, en muchos casos no solo son injustas, sino que además
son ineficaces. Si una medida supone un pequeño ahorro ahora y un gran gasto el
día que suceda una desgracia se convierte en una medida que nadie debe
defender, ni de derechas ni de izquierdas, ya que no solo hablamos de medidas
que ahogan a la población, sino de medidas económicamente ineficaces en un
largo plazo, es decir, que la ahogan para nada.
Es una pena, pero nuestro gobierno apuesta por modelos políticos económicos neoliberales, con el fin de crear el caos, como ya sucedió en Chile y Reino Unido con Tacher. El poder lo tiene el pueblo y como hoy podemos ver sólo sale a las calles por deporte, mientras es testigo y principal afectado del desmantelamiento de el estado de bienestar donde vivía.
ResponderEliminarJachi.